La evaluación: hacia una visión de los valores y cualidades propios Encontrarse con poblaciones indígenas, acercarse a su riqueza cultural y a su forma de concebir la vida y su proyecto educativo, fue el objetivo del equipo del Icfes en cabeza de su directora, Mónica Ospina Londoño, durante su visita a la comunidad Nasa en Inzá Cauca durante el mes de septiembre, en la cual fueron compartidos temas de interés común con la Asociación de Autoridades Consejo Territorial de Pueblos Indígenas de Inzá – Cauca, Juan Tama.
El pueblo Nasa abrió las puertas al diálogo entre su comunidad y el Instituto colombiano para la evaluación de la educación permitiendo un espacio de interacción, en el que se compartieron los procesos que realizan internamente los líderes de los establecimientos educativos y los representantes del instituto para mejorar el desempeño escolar, basados en los resultados de las diferentes evaluaciones estandarizadas. La voz de la comunidad Nasa, representada por varios de los dinamizadores de ocho sedes de establecimientos que cuentan con 610 estudiantes, cobró especial importancia, al coincidir en que la educación es fundamental, tanto como la diversidad cultural, y esta última debe ser tomada en cuenta para la construcción de contenidos en los exámenes de Estado.
En este sentido, se pretende que haya mayores encuentros para escuchar y contextualizar los resultados de la evaluación del examen Saber 11° con los territorios indígenas. El sistema educativo de la comunidad Nasa gira alrededor de la identidad cultural, el respeto por la madre tierra y por sus orígenes, por estas razones, el conocimiento de sí mismo, su territorio, su ambiente, su economía y su lengua son fundamentales para la construcción del plan de vida.
Se trata de una educación para la vida, aspecto que señalan sus líderes es la esencia de sus aprendizajes, de aprender desde la experiencia. Este tipo de educación forja el camino hacia el buen vivir, y en este sentido, el espacio de interacción con el Icfes permitió una concepción más cercana de los resultados y pensar en prepararse para los exámenes con estrategias alternativas, puesto que estas evaluaciones “no determinan si el estudiante es bueno o malo, sino que permite ver una visión de los valores y cualidades” y este es el primer paso para trabajar desde y para las comunidades. Este intercambio resaltó la importancia para las instituciones indígenas de apropiarse de los resultados, que en el caso del examen Saber 11°, es importante para los estudiantes que ingresarán a entidades de educación superior y de quienes se espera, regresen a compartir sus conocimientos luego de haber finalizado sus estudios de educación superior.
El trabajo de los educadores y directivos de establecimientos ha sido el de fortalecer los nexos con su territorio, y como prueba de este sentido de pertenencia, nace el ejercicio de gobierno escolar en los resguardos, de la representación de un cabildo y de las acciones que establecen para ejercer su propia gobernabilidad, este modelo permite que las y los estudiantes conozcan su territorio y cultura, con el propósito de no desaparecer y de promover en ellos buenos hábitos, prevenir el consumo de sustancias psicoactivas y que no ingresen a grupos armados. Para la directora de la entidad, esta mesa de trabajo fue un escenario democrático de diálogo permanente, de trabajo colectivo en igualdad de condiciones que permitió iniciar el diseño de un proyecto estratégico que promueva la inclusión, la diversidad y cumplir el objetivo fundamental de compartir saberes.
Para el equipo del Icfes, el proyecto transversal de inclusión es un escenario ideal para que las comunidades puedan conocer el valor social de los resultados, y de esta manera, se puedan tejer lazos colaborativos con las comunidades étnicas que sirvan para construir un mejor instrumento de evaluación, más inclusivo, mejor desarrollado, en el que todas las personas se sientan representadas.
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